Las cocinas han evolucionado hacia lo “light”. De grandes cocinas de pie, hemos pasado a cocinas ultra ligeras, planas, empotrables ¡y casi invisibles!
Sin embargo, las clásicas cocinas de pie aún sobreviven, con diseños que le dan un aire vintage al ambiente, e incluso ahora se pueden encontrar en varios colores. Las cocinas empotrables o encimeras, por su parte, son placas delgadas que se “incrustan” o encajan en orificios hechos en el mueble de cocina para que queden lo más planas posibles, lo cual ahorra espacio y permite que la cocina se vea como las de los programas gourmet de la televisión. Escoge la que más se ajusta a tus gustos, estilo y forma de cocinar aquí, en Promart.
Cocinas de pie a gas: Gran ahorro de energía
Las cocinas de pie de Promart funcionan a gas, lo cual brinda un gran ahorro de energía. ¿Le tienes miedo al balón de gas? ¡No hay por qué! Solo basta tener cuidados básicos, como ver que la manguera esté en buen estado, comprar el balón en distribuidores autorizados y, si sientes algún olor extraño, saber cómo cerrar la salida general del gas (y que lo sepa toda la familia). Es bueno tener el balón en un lugar cercano a la cocina para evitar que una manguera muy larga pueda generar pérdidas de gas en el trayecto y, de preferencia, en un mueble cerrado, para que los niños no puedan manipular las llaves.
Cocinas empotrables o “encimeras”: Modernas y chic
Además de ahorrar espacio, pues la parte de abajo del mueble puede ser usada para otras cosas, resultan de lo más modernas: las hay con base de vidrio templado y también de acero inoxidable, con hornillas tradicionales o con paneles digitales “touch control”… ¡todo un espectáculo! Lo que debes tener en cuenta al elegir una cocina empotrable o encimera, es el material donde la vas a colocar: la piedra (como el granito) siempre será el mejor. Lo otro es el orificio donde la vas a encajar: debe tener las medidas precisas para que la cocina entre sin problema y no “baile”. Promart te ofrece cocinas encimeras tanto a gas como eléctricas.
La limpieza de tu cocina: Indispensable. Para mantener en buen estado nuestra cocina, ya sea de pie o encimera, hay que limpiarlas con los productos adecuados: si son de acero inoxidable con productos especiales para este material (¡no con el detergente que usas para lavar los platos!) para proteger el cromado. Tampoco conviene rasparlas con esponjas de acero, sino usar paños suaves para las superficies. Si tiene hornillas, debes bajar la llave del gas y desenchufar la cocina antes de desmontar las hornillas, que sí pueden lavarse en agua caliente y con detergente común. No olvides limpiar tu cocina por detrás (siempre se acumula grasa ahí) y tampoco olvides el horno, si tu cocina es de pie: un truco es llenar una bandeja con agua, limón y bicarbonato y ponerla a “hornear”, el vapor limpiará las paredes del horno de manera natural y le dejará un rico olor.
Tip: si prefieres evitar la manipulación de fósforos, escoge cocinas a gas con encendido eléctrico, es decir, enchufándola y con una vuelta de perillas se prenderán las hornillas ¡así de fácil! Solo ten en cuenta ubicar la cocina cerca de un enchufe (además de que también esté cerca al balón de gas)